Cómo hacer tortilla de calabacín y cebolla. Receta fácil y muy rica
Ingredientes para 2 personas
- 5 huevos.
- 1 cebolleta o cebolla.
- 1 calabacín grande o 2 pequeños.
- Aceite de oliva y sal.
Esta tortilla es muy fácil, riquísima y rápida de preparar. Además se puede tomar en caliente pero también en frío lo que permite prepararla para llevar por ejemplo de picnic o a la playa y también que sea perfecta para esos aperitivos fríos con la familia o los amigos o incluso en cualquier celebración informal. A nosotros nos gusta que el huevo quede perfectamente cuajado pero sin perder jugosidad aunque también sabemos que hay a quien le gusta que el interior quede un poco líquido por lo que en la receta te doy las indicaciones para que la prepares a tu gusto tanto si te gusta de una forma como de otra.
Preparación, cómo hacer la tortilla de calabacín y cebolla
- Lava el calabacín y córtalo en rodajas finas, tal y como puedes ver en las fotografías.
- Aunque puedes cocinarlo en sartén, a mi me gusta mucho más cómo queda en el microondas. Pon las rodajas de calabacín en un estuche o recipiente apto para cocinar en el microondas microondas tapado con papel film y cocínalo 8 minutos a máxima potencia (suelen ser 800W).
- Mientras se cocina el calabacín pela la cebolla y córtala en trocitos. Yo prefiero no picarla mucho porque me gusta que se noten los trocitos de cebolla, también podrías cortarla en tiras.
- En una sartén (la que yo he utilizado mide 24 cm de diámetro) con un par de cucharadas de aceite y a fuego medio-bajo, echa la cebolla junto con un poco de sal y deja que se poche durante unos 10 minutos, hasta que empiece a dorarse. Personalmente me gusta que llegue poco dorada a la tortilla aunque esto ya va en gustos.
- Cuando la cebolla ya esté prácticamente lista incorpora el calabacín que ya se habrá cocinado en el microondas (escúrrelo bien antes de añadirlo) y revuélvelo todo 2 minutos a fuego medio. Reserva.
- En un bol casca los huevos, echa un poco de sal y bátelos enérgicamente con unas varillas o un tenedor.
- Incorpora la cebolla y el calabacín y revuélvelo todo para que queden bien mezclados e impregnados.
- Pon la misma sartén a fuego medio-bajo con un poquito de aceite y ahora cuaja la tortilla. Vierte la mezcla de huevos, calabacín y cebolla en la sartén y cuando notes que se ha cuajado por abajo (puedes comprobarlo moviendo un poco la sartén y viendo que todo va junto en un bloque unido y despegado de la sartén), entonces es cuando debes darle la vuelta.
- Para darle la vuelta coge una tapadera o plato de mayor tamaño que la sartén, cúbrela y ahora vuelca todo el contenido de la sartén en el plato o tapadera, de forma que ahora puedas ver la parte cuajada de la tortilla por arriba. Con cuidado, desliza la tortilla de nuevo del plato a la sartén para que se cuaje por ese lado.
- Ahora el punto lo decides tú. Si prefieres que la tortilla quede un poco líquida por dentro, pon el fuego un poco más fuerte (solo un poco) para que se cuaje rápidamente por fuera, y apártala a un plato. Si te gusta más que quede perfectamente cuajada mantén el fuego muy suave para que no se queme por fuera, pero que el interior se cuaje perfectamente. Podrás hacer la prueba con un palillo, introduciéndolo para comprobar cuanto de líquido está el interior. ¡Y lista!
Tiempo: 30 minutos
Sirve y degusta
Las tortillas están listas para consumir en el momento, recién calentitas. Sin embargo, somos muchos los fans de las tortillas frías, esas tortillas que has hecho unas horas antes o incluso la noche anterior, que han reposado suficientemente, y que se mantienen a temperatura ambiente deliciosas y cuajadas. ¡Un espectáculo!
Sírvela al centro incluso en la propia sartén con un salvamanteles debado o directamente en los platos de los comensales. Y por supuesto, que no falten unas buenas rebanadas de pan 😉
Variaciones
Las tortillas admiten todo tipo de cambios, por ejemplo puedes añadir a la vez que la cebolla un ajito picado para realzar aún más los sabores o sustituir la cebolla por unos ajos tiernos. También puedes incluir alguna hierba como perejil u orégano y también especias como pimentón dulce o comino, te aseguro que le van genial.
Consejos
La clave para hacer la tortilla es el control de la temperatura del fuego. Para no equivocarte, lo mejor es que lo mantengas medio-suave para que se cuaje poco a poco y, sobre todo, que no se te queme, ya que es lo único que no podrás arreglar.
Quítate el miedo a darle la vuelta a la tortilla! Con una tapadera firme o un plato, siempre mayores que la sartén utilizada (este suele ser el problema habitual porque utilizar un plato más pequeño es un desastre), no tendrás ningún problema para darle la vuelta y cuajarla perfectamente por los dos lados.