Las mejores recetas con espinacas, fáciles y riquísimas
Las espinaca es una de mis verduras preferidas desde siempre, y se que no es algo habitual. Cuando era niña no me gustaba casi nada y de lo que comía lo hacía en poquita cantidad, vamos una pesadilla, pero dentro de ese reducido menú estaban las espinacas, concretamente salteadas con ajos y piñones y, atención, ¡en bocadillo!
Pues todavía hoy en día siempre que puedo me preparo un bocadillo de espinacas pero además las preparo de muchas más formas porque es una verdura muy versátil y os voy a contar un montón de formas de cocinarla en este recopilatorio con las mejores recetas con espinacas (en este enlace también las encontraréis todas). A veces son las protagonistas pero en ocasiones sirven de relleno en ciertas preparaciones o como complemento.
Algunos consejos para preparar las espinacas:
Yo siempre que he comprado espinacas las he encontrado frescas en bolsa, congeladas o con sus tallos en forma de ramillete en los mercados cuando es temporada. Sin duda alguna me quedo con estas últimas porque su sabor es más potente pero tienen el inconveniente de que solo están disponibles en temporada y además hay que lavarlas. Para lavarlas lo mejor es sumergirlas en un bol con abundante agua y cambiar el agua varias veces, también podéis pasar cada hoja bajo un chorro de agua fría pero así se me hace un poco más pesado y además se gasta bastante agua.
A mi no me da pereza lavarlas y las compro frescas y enteras siempre que puedo pero lo cierto es que en varias etapas en las que por mi ritmo de vida o por vivir en cierto lugar no he podido encontrarlas así he recurrido sin problemas sobre todo a las congeladas y el resultado es igualmente muy bueno. Tanto las congeladas como las que van en bolsas no hace falta lavarlas y van directas para ser cocinadas, de hecho las congeladas se pueden echar a una olla con agua hirviendo directamente, sin descongelación previa, y cocer los minutos que indique la bolsa.
Espinacas, las protagonistas de la receta:
- Espinacas salteadas con ajos y piñones: como os decía es mi forma preferida de cocinar las espinacas y una vez listas a veces en plato acompañadas de rebanadas de pan o directamente en bocadillo. Se que parece algo extraño pero os aseguro que está buenísimo.
- Espinacas a la crema gratinadas: es todo un clásico y a veces no hay otra forma de que l@s niñ@s coman espinacas pero no me extraña porque quedan cremositas y la capa de queso ayuda mucho.
- Ensalada de espinacas frescas con champiñones y mango: lánzate a consumir las espinacas frescas y ponlas en una ensalada con lo que más te guste. En esta ocasión quise hacer una mezcla diferente y aposté por comer también crudos los champiñones. La combinación con el mango es deliciosa 😉
Rellenos con espinacas:
- Lasaña de espinacas: entre lo que me gusta la pasta y las espinacas, está entre mis platos favoritos. Además verás que os enseño a elaborar una buena bechamel casera que es el colofón para conseguir un plato completo y súper sabroso.
- Empanadillas de espinacas con queso de cabra y nueces: las empanadillas al horno son mi debilidad, desde que descubrí lo buenas que quedan así ya no las frío nunca y el relleno es fantástico porque las espinacas casan genial con frutos secos y quesos potentes.
- Croquetas de espinacas y piñones: uno de los aperitivos más deseados en versión vegetariana, estas croquetas triunfan porque el interior está cremoso y lleno de sabor.
- Hojaldre relleno de salmón con queso feta y espinacas: parece un plato ideal para ocasiones especiales pero está tan rico que siempre que puedo lo preparo. Se juntan muchos de mis ingredientes preferidos ya que el hojaldre me encanta a más no poder y el relleno queda de auténtico… ¡escándalo!
- Quiche de verduras y queso: tengo muchas quiches en el blog y últimamente la que más preparo es ésta que va repleta de verduras entre las que están las espinacas. Verduras y queso siempre es una combinación ganadora 😛
Espinacas en platos tradicionales y de cuchara:
- Potaje de garbanzos con bacalao y espinacas o potaje de vigilia: es el clásico potaje que se suele tomar en Semana Santa pero lo cierto es que está tan rico que durante todo el invierno apetece. Veréis que os enseño a prepararlo en olla normal y también en olla a presión para ahorrar muchísimo tiempo sin perder nada de sabor, tanto éste como el resto de platos con garbanzos.
- Potaje de garbanzos con espinacas y chorizo: es uno de mis preferidos, el choricito le da un toque a los potajes y guisos magnífico y si encima lleva espinacas para mi es lo más. Queda súper sabroso, con un caldito un poco espeso y meloso que es una delicia.
- Tapa de garbanzos con espinacas: muy típica de Andalucía, sobre todo de Sevilla, este plato se sirve a modo de tapa para el aperitivo y tiene un toque muy exótico gracias a las especias que lleva y que lo hacen tan especial.
- Puré de verduras o crema de verduras fácil, rica y saludable: cómo no iba a incluir espinacas en esta receta repleta de verduras. Además gracias a ellas se consigue ese color verde tan bonito y su sabor se mezcla genial con el resto de ingredientes.
Contadme, ¿cuáles son vuestras recetas preferidas con espinacas?