Macarrones con salsa roquefort sin nata
Ingredientes para 4 personas
- Para la salsa roquefort sin nata:
- 300 ml de leche desnatada.
- 100 g de queso roquefort.
- 1 cebolla.
- 1 cucharadita de harina de maíz.
- Aceite, sal y pimienta negra molida.
- Para la pasta:
- 300-350 g de macarrones (o cualquier otro tipo de pasta que te guste).
- Un poco más de queso roquefort en trocitos para decorar por encima.
- Sal y orégano.
Están elaborados con una salsa roquefort sin nata, resultando una combinación estupenda, cremosa y potente de sabor. Una auténtica delicia para los amantes de los quesos de potente sabor, ya que en vez de roquefort puedes incluir otros quesos azules o de cabra, o incluso elaborar la salsa con una mezcla de todos ellos.
Preparación, cómo hacer macarrones con salsa roquefort sin nata
- Prepara los macarrones: pon agua (que después cubra de sobra la pasta) a cocer en una olla, y una cucharadita de postre de sal. Cuando hierva, añadir la pasta y, cuando vuelva a hervir, contar los minutos que muestre el paquete (en este caso son 10 minutos).Cuando estén listos, escúrrelos.
- Mientras se cuecen los macarrones, preparamos salsa roquefort sin nata siguiendo estos pasos:
- Pela la cebolla y pícala muy finita. En una sartén o cazo a fuego medio y con un poco de aceite, añade la cebolla y un poco de sal, y deja que se poche durante 10 minutos, quedando transparente sin llegar a dorarse.
- Desmenuza el queso roquefort y añádelo a la cebolla cuando esté lista, removiendo para que se derrita.
- En un vaso, mezcla parte de la leche con la harina de maíz, y con ayuda de una cucharilla disuélvela bien.
- Cuando el roquefort se haya derretido, incorpora la leche con la harina de maíz, remueve un poco y ve incorporando el resto de la leche, sin dejar de remover. Añade un pimienta negra molida al gusto y sal.
- Deja el fuego lento y sigue cocinando durante 5-10 minutos, removiendo de vez en cuando, hasta que se espese ligeramente. Si se ha espesado demasiado añade un poco de leche y aparta del fuego, y si por el contrario está demasiado líquida para tu gusto, vuelve a diluir un poco de harina en leche y añádela.
Tiempo: 25 minutos
Sirve y degusta
Sirve los macarrones escurridos en los platos de los comensales. Riega por encima con la salsa roquefort (que puedes ponerla en una salsera), y si te gusta puedes espolvorear un poco de orégano por encima, e incluso unos pedacitos de queso roquefort. También puedes poner todos los macarrones en una fuente grande o bol, añadir la salsa y mezclarlos bien para a continuación servirlos en los platos.
Tómalos muy calientes y mézclalos bien con la salsa, que estará cremosa y con un potente sabor a roquefort. De auténtico… ¡escándalo!
Variaciones
Puedes preparar esta misma receta con cualquier otro tipo de pasta: spaguettis, tallarines, espirales… La salsa roquefort, como otros tipos de salsas italianas, se adaptan a cualquier tipo de pasta. Incluso puedes utilizar esta salsa para una rica lasaña de verduras o carne, como si fuese la salsa bechamel 😛
Consejos
Observa bien el estado de la salsa, que no se pegue en el fondo y sobre todo que sea tan cremosa como prefieras. Ten en cuenta que cuando se enfría se vuelve más densa, así que sácala del fuego en cuanto esté casi como a ti te gusta, porque en el plato terminará de adquirir su textura final.