Pan casero con Thermomix, sencillo y buenísimo
Ingredientes para un pan en cazuela de 24 cm de diámetro
- Prefermento:
- 100 g de harina de trigo integral o incluso de centeno integral (puedes hacerlo también con harina de trigo blanca, en ese caso añade solamente 60 g de agua).
- 65 g de agua.
- 3 g de levadura fresca o 1 g de levadura de panadería seca.
- Masa:
- 500 g de harina panificable o panadera (debes ver en el paquete que cada 100 g ponga que tiene de proteínas entre 10 y 11 g). Suele encontrarse en cualquier supermercado como harina de fuerza, pero fíjate en los valores de las proteínas.
- 335 g de agua.
- 10 g de sal.
- 0,5 g de levadura fresca o 0,2 g de levadura de panadería seca.
- Un poquito de aceite de oliva virgen extra.
- Una cazuela u olla con tapa y que se pueda meter en el horno. Es muy importante que no tenga ninguna pieza de plástico. A veces lo único que tienen de plástico es el asa de la tapadera, si se puede destornillar hazlo, y no olvides tapar el agujero que queda introduciendo papel de aluminio.
Este pan queda buenísimo, se consigue una hogaza de pueblo fantástica con su corteza bien crujiente y el interior tierno y aromático. Lo único que necesitas es planificarte con antelación ya que es una masa que puedes dejar lista por ejemplo el día de antes (lo cual viene genial para no estar esclavo de los tiempos del pan y organizarse). La olla es importante porque imita el efecto de un horno panadero en el que hay humedad para que se desarrolle bien el pan y su corteza. Lo mejor de todo es que la Thermomix se encarga de la parte más engorrosa que es la de amasar, y el resto es practicar, ir cogiéndole el puntillo a tu horno y sacar panes cada vez más ricos.
Preparación, cómo hacer pan casero en cazuela
- El primer paso es preparar el prefermento. Pon en el vaso de la thermomix los ingredientes del prefermento (la harina de trigo integral, el agua y la levadura) y mézclalos durante 10 segundos a velocidad 4.
- Si hay restos por las paredes bájalos con ayuda de la espátula y mezcla de nuevo 10 segundos a velocidad 4.
- Saca la masa del vaso con la espátula y ve poniéndola en un bol. Cógela para que se vaya compactando y amásala un minuto con tus manos hasta hacer una bola con ella.
- Déjala en ese bol, tapado, y que fermente durante una hora o hora y media a temperatura ambiente (en invierno busca una habitación cálida y en verano una fresquita, pero siempre sin corrientes de aire) hasta que doble su volumen. También puedes introducir el bol en la nevera y así utilizar este prefermento al día siguiente o incluso más allá ya que puedes dejarlo hasta 3 días en la nevera y así te puedes organizar como prefieras para elaborar el pan
- Cuando el prefermento esté listo y quieras seguir con el proceso, pon en el vaso de la Thermomix los ingredientes de la masa: la harina panificable, el agua, la sal y la levadura, y por supuesto el prefermento.
- Mézclalo todo junto durante 10 segundos a velocidad 4 y a continuación amasa durante 3 minutos a velocidad Espiga.
- Espera 30 minutos y vuelve a amasar otros 3 minutos a velocidad Espiga.
- Échale un chorrito de aceite de oliva al recipiente que vayas a utilizar para guardar la masa (debe ser más del doble de grande que la masa).
- Saca la masa del vaso con ayuda de la espátula, amásala un poco con tus manos hasta que tenga forma de bola y ponla en el recipiente aceitado.
- Tápalo y a fermentar, para ello tienes dos opciones:
- A temperatura ambiente durante unas 3 horas o hasta que doble su volumen
- De nuevo fermentación en nevera (mínimo una noche entera, máximo 3 días). Yo suelo realizar la fermentación en nevera porque así preparo la masa por la tarde y al día siguiente lo horneo.
- Cuando ya haya subido tendrá un aspecto «fofo» y lleno de aire. En esta ocasión la he dejado 2 días en la nevera, cuando la dejo 1 día suele tener menos aire, pero no pasa nada, es algo normal.
- Enharina una superficie, coloca la masa encima y hazle pliegues desde los extremos hacia dentro para formar una especie de hatillo.
- Dale la vuelta y deja que repose con los pliegues hacia abajo sobre la superficie enharinada y tapada con un paño durante una hora.
- 20 o 30 minutos antes de que se cumpla la hora, precalienta tu horno a 250ºC con resistencia arriba y abajo y con la cazuela con la tapa en su interior para que se calienten (recuerda que no tengan ninguna pieza de plástico y que los posibles agujeros de la tapa estén tapados con papel de aluminio).
- Cuando la masa haya estado reposando una hora, saca la olla del horno y coloca la masa en ella dándole la vuelta de nuevo de forma que los dobleces del hatillo ahora estén arriba. Ten mucho cuidado de no quemarte al introducir el pan en la olla! Te recomiendo manipular la olla con guantes de horno para evitar cualquier quemadura.
- Rápidamente tapa la cazuela con la tapadera y al horno a una altura un poco por debajo de lo que sería la mitad del horno.
- Al cabo de 15 minutos retira la tapadera, baja la temperatura del horno a 200ºC y deja que se cocine alrededor de 50 minutos o hasta que veas que la corteza se ha dorado bastante.
- Saca la olla del horno y el pan de ella y colócalo en una rejilla para que se enfríe sin humedecerse y que esté crujiente.
- Déjalo enfriar totalmente antes de cortarlo para que su estructura se asiente y esté perfecto.
Tiempo: 15 minutos de preparación y amasado + varias horas de reposo según el método elegido + 60 minutos de horneado
Sirve y degusta
Lo ideal es dejar reposar el pan de un día para otro para asegurarnos de que está completamente frío y su miga ya asentada, pero si quieres o necesitas utilizarlo después de hornearlo, espérate al menos 30 minutos o 1 hora para que se enfríe bastante.
Utiliza un cuchillo bien afilado para partir las rebanadas y empezar a disfrutar de este fantástico pan al estilo de las hogazas de pueblo y con un sabor increíble. No hace falta que diga que el pan es ideal para cualquier comida del día, ya sea para desayunar, almorzar, de aperitivo, para comer, merendar, o cenar. Y concretamente éste pan está de auténtico… ¡escándalo!
Variaciones
Lo más fácil para modificar este pan es añadirle semillas o frutos secos en trocitos e incluso pasas. Para añadirlos lo ideal es hacerlo justo antes del último amasado de 3 minutos en la Thermomix.
Utiliza esta masa para preparar panes individuales de unos 50-60 g de peso, dándoles la forma que prefieras. Como no vas a utilizar la cazuela, para conseguir una buena corteza introduce en el horno una bandeja metálica lo más abajo posible cuando empieces a calentarlo. Pon los panecillos sobre papel de horno en una bandeja y, al introducirlos en el horno, vierte un vaso de agua sobre la bandeja metálica que teníamos de antes, así se creará vapor, lo que facilita que se consiga la corteza. A los 15 minutos saca esa bandeja del horno y sigue horneándolos pero vigilándolos ya que necesitarán menos tiempo de horno y éste depende de la forma que les hayas dado. Este truco también te sirve para hornear el pan si no tienes una cazuela apta para horno.
Consejos
Vigila el pan en el horno, que no se queme la corteza ni se haga en exceso, pero que tampoco se te quede demasiado blanquito ya que podría estar sin cocer aún el interior y además no quedará con corteza.
Para conservar el pan te recomiendo guardarlo en una bolsa de plástico cerrada, permanecerá fantástico durante 4-5 días y como más rico está es tostándolo un poco ya que así la corteza vuelve a estar muy crujiente.
También puedes congelarlo como cualquier pan, e incluso si lo has congelado ya cortado en rodajas puedes descongelarlo poniendo la rebanada directamente en la tostadora.