Salpicón de marisco. Receta con pulpo, gambas y mejillones
Ingredientes para 4 personas
- 200 g de langostinos, pueden ser ya cocidos o cocerlos en casa, tanto frescos como congelados.
- 2 patas de pulpo cocidas (unos 400 g de pulpo fresco, que suele quedarse en la mitad una vez cocido, en unos 200 g).
- 800 g de mejillones (que equivaldrán a unos 200 g de mejillones ya cocidos y sin conchas).
- 1/2 pimiento rojo.
- 1/2 pimiento verde.
- 1/2 pimiento amarillo (si no lo encuentras fácilmente, simplemente añade un poco más de pimiento rojo y verde y omite el amarillo).
- 1/2 cebolleta.
- 1 diente de ajo.
- 3 cucharadas de olivas negras con hueso.
- Unos 50 ml de vinagreta formada por 2 partes de aceite de oliva virgen extra y una de vinagre (de manzana o de vino blanco). Sería como un vaso de chupito de vinagreta, y puedes ir echando 2 cucharadas de aceite y una de vinagre hasta completar el vaso.
- Sal.
El salpicón de marisco es una receta que me resulta muy curiosa. Por un lado me parece un plato de lo más refrescante (se sirve frío) y perfecto para el verano, a modo de ensalada. Además, sus ingredientes son de lo más sanos y naturales, por lo que es una receta que apetece en los meses más calurosos. Pero por otro lado, la exquisitez del marisco con el que se prepara hace que sea digna de las ocasiones más especiales, y sus colores se prestan a presentaciones de lo más originales y resultonas.
Preparación, cómo hacer la receta de salpicón de marisco
- Prepara los langostinos:
- Si compras los langostinos ya cocidos, puedes saltarte este paso.
- Si vas a cocerlos sigue nuestra receta para cocer langostinos y que queden jugosos, tanto frescos como congelados. Para ello si estaban congelados descongélalos, cuécelos en tandas de 12 en abundante agua salada hirviendo, apaga el fuego, déjalos en el agua 2 minutos y medio, escúrrelos y sumérgelos en un bol que habrás preparado con agua, sal y hielo. Al cabo de 5 minutos escúrrelos y déjalos secar en un plato con papel de cocina.
- Prepara los mejillones: sigue nuestra receta de mejillones al vapor, pero sin añadir ningún condimento, es decir, SOLO los mejillones.
- Límpialos bien eliminando los residuos exteriores y cortando los filamentos, lávalos bajo el chorro de agua fría, y desecha los que no están vivos (al golpearlos no se cierran, o tienen la concha rota).
- Introduce los mejillones en una olla o cacerola y enciende el fuego a temperatura alta.
- Mantenlos 1o minutos cocinando con la olla tapada, y pasado ese tiempo retíralos y deja que se enfríen.
- Cuece el pulpo como en nuestra receta de pulpo a la gallega:
- Limpia muy bien cada tentáculo de las patas bajo un chorro de agua fría.
- En una olla, añade suficiente agua para que cubra el pulpo, una cucharada sopera de sal, y lleva a ebullición.
- Separa las patas del pulpo y sumerge cada pieza, de una en una, en el agua hirviendo 3 veces dándole «sustos«: mete la pieza sujetándola por los dedos (cuidado, no te quemes!), deja 2-3 segundos y vuélvela a sacar. Repite este proceso 3 veces, y a la tercera vez deja la pata dentro de la olla. Haz lo mismo con cada pata.
- Cuando el agua esté hirviendo con todo el pulpo dentro, cuenta a partir de ahí 30 minutos, y mantén el fuego fuerte. Escúrrelo y déjalo enfriar.
- Cuando ya tenemos los mariscos listos y fríos, podemos preparar el salpicón. Lo ideal es que prepares los mariscos el día anterior y los mantengas en la nevera.
- Corta los langostinos en dos, quítale la concha a los mejillones y corta en rodajas las patas de pulpo, y ponlos todos juntos en un bol amplio.
- Pica muy pequeñita la cebolleta y los pimientos. Deshuesa las olivas y pártelas por la mitad. Incluye todos estos ingredientes en el bol.
- Prepara la vinagreta: pela y pica muy finito el ajo, e introdúcelo junto con un poco de sal, el aceite y el vinagre en un tarro o botella. Ciérralo bien y agítalo hasta que la mezcla emulsione y se vea ligada.
- Vierte la vinagreta por encima del bol donde están los ingredientes.
- Remueve para que quede todo bien impregnados.
- Lo ideal es que tapes el bol con papel film y lo dejes unas horas reposando en la nevera, para que el sabor sea más potente y sabroso, y lo tengas bien fresquito, que es como se suele servir.
Tiempo: cocción de los mariscos el día anterior, y 30 minutos para preparar el salpicón
Sirve y degusta
Saca el salpicón de la nevera, y sírvelo bien frío. Las posibilidades de presentación son muy variadas, ya que puedes sacar el bol directamente al centro de la mesa. Pero para ocasiones más especiales, te recomendamos recurrir a copas como nosotros, o también vasitos o pequeño boles, cucharitas… Lo que más te guste.
Puedes poner en la mesa colines, rosquilletas o pequeñas tostadas para acompañar, y si te sobra, puedes mantenerlo en la nevera perfectamente 3-4 días, tapado con papel film o en un recipiente hermético cerrado. ¡Que aproveche!
Variaciones
Puedes incluir el marisco que prefieras, según tus gustos y también el bolsillo. Gambas, surimi, berberechos… existen muchísimas combinaciones, y con cualquiera de ellas te va a quedar un salpicón muy sabroso 😉
Si quieres darle un toque exótico y más fresco aún, incluye trocitos de fruta: mango, piña, papaya, bolitas de melón o de sandía, y por supuesto el aguacate en daditos le queda genial.
Consejos
Es fundamental cocer muy bien los mariscos para que el resultado sea el deseado, y que queden jugosos y de textura suave. Para el pulpo te recomendamos utilizar nuestro método, te va a quedar de auténtico… ¡escándalo!
¡Salpicón exprés! Compra los langostinos cocidos, utiliza mejillones en conserva, y prescinde del pulpo. En 30 minutos puedes tener tu salpicón listo.