Salsa ranchera o salsa ranch, un aderezo casero delicioso
Ingredientes
- 150 g de mayonesa. Si quieres elaborarla casera puedes seguir nuestra receta de mayonesa casera, muy sencilla y rica.
- 75 g de crema agria. Si no la encuentras ya hecha puedes prepararla casera con 75 ml de nata líquida para montar (con un mínimo de 35% materia grasa) y 1 cucharadita de postre de zumo de limón o de lima.
- Suero de leche (opcional). En función del tipo de mayonesa que utilices y de si te gusta la salsa más o menos líquida puedes necesitarlo, en la receta lo explico. El suero de leche se puede conseguir en casa mezclando leche entera con un poco de zumo de lima o limón, como la crema agria.
- 1 cucharadita de postre de ajo en polvo.
- 1 cucharadita de postre de cebolla en polvo.
- 1 cucharadita de postre de cebollino fresco o seco.
- 1 cucharadita de postre de eneldo fresco o seco.
- 1/2 cucharadita de postre de pimienta negra molida.
- Un poco de sal.
Se trata de un aderezo casero delicioso que tradicionalmente se ha utilizado en Estados Unidos para aliñar ensaladas pero ahora también es muy popular para mojar ingredientes, sobre todo patatas. Va repleta de hierbas e ingredientes aromáticos y la base es la mayonesa y la crema agria. Ambas se pueden encontrar ya hechas pero en la receta aprenderás a preparar cada una de forma casera si lo prefieres.
Cómo hacer la salsa ranchera
- Si vas a preparar la mayonesa casera, sigue nuestra receta y cuando la tengas lista sigue con esta receta.
- Vamos con la crema agria casera. Pon la nata en un pequeño bol (tiene que estar recién sacada de la nevera, bien fría) y échale un chorrito de zumo de lima o de limón (aproximadamente una cucharada de postre). Mezcla un poco con una cuchara y en cuestión de pocos segundos (yo solamente tuve que esperar 3!) verás como la nata de repente coge cuerpo y se pone muy densa así que ya tendrás lista la crema agria. Mantenla en la nevera hasta el momento de utilizarla si la preparas con antelación.
- Pon en un bol la mayonesa, la crema agria, el ajo en polvo, la cebolla en polvo, el cebollino (si es fresco pícalo finito), el eneldo (igualmente si es fresco pícalo pequeño), la pimienta negra y un poco de sal.
- Mezcla con una cuchara y ya tienes la salsa ranchera lista. Si te ha quedado un poco espesa puedes añadir un poco de suero de leche para diluirla (o incluso solamente leche). Para prepararlo no tienes más que mezclar en un bol un poco de leche (2 o 3 cucharadas soperas) con unas gotitas de zumo de lima o de limón. Remueve con una cuchara y espera unos 5 minutos, verás que parece que la leche se ha cortado, ese es el resultado que buscamos.
- Prueba el aliño ranchero por si tienes que rectificarlo de algún sabor añadiendo más cantidad de cualquier ingrediente, por ejemplo un poco más de mayonesa para suavizar el sabor o más pimienta para potenciarla.
- Mantenla en la nevera en un recipiente cerrado hasta el momento de utilizarla.
Tiempo: 5 minutos
Sirve y degusta
Mantén esta salsa en la nevera, el tiempo que puede conservarse depende de si la mayonesa es casera ya que si es casera deberías gastarla en 1 día o 2 como mucho, y si la mayonesa es industrial esta salsa puede aguantar en la nevera perfectamente 3-4 días o incluso más.
Es una salsa y también un aliño según el uso que se le de ya que es muy popular para acompañar ensaladas pero también para mojar todo tipo de ingredientes, lo más común patatas cocinadas de cualquier forma pero también otros bocados que se cojan con la mano. Además queda genial con carnes de sabor suave como el pollo y también pescados. Cremosa y repleta de sabor, disfruta de esta salsa de auténtico… ¡escándalo!
Variaciones
Puedes cambiar las proporciones de los ingredientes a tu gusto según si la prefieres más suave o, por el contrario, más intensa de sabor.
También puedes añadir o quitar ingredientes, sobre todo si se trata de hierbas aromáticas y especias, por ejemplo incluir un poco de orégano, tomillo o romero le sienta muy bien. También puedes incorporar unas gotitas de salsa Perrins, le sienta muy bien.
Consejos
Siempre que prepares una salsa no olvides probarla una vez lista por si tienes que rectificarla. Puede ser de sabor, añadiendo más cantidad de alguno de los ingredientes, o incluso de textura por si la quieres más o menos fluida.