Solomillo de cerdo ibérico al horno con uvas y patatas con mantequilla de hierbas
Ingredientes para 4 personas
- 1 kg de solomillo de cerdo ibérico (serán unas 2-3 piezas). Si no es ibérico también está muy rico, pero siendo ibérico el sabor se multiplica.
- 3 o 4 patatas pequeñas de guarnición por comensal, en total unas 12-16. Si no encuentras pequeñas puedes utilizar patatas de tamaño medio y partirlas por la mitad.
- Uvas rojas sin semillas, cantidad al gusto.
- 200 ml de vino Pedro Ximénez.
- 3 o 4 cucharadas soperas de mantequilla sin sal.
- 1 cucharada sopera de hierbas secas. Puedes mezclar tomillo, romero y orégano.
- Aceite de oliva, pimienta negra molida y sal.
Equilibrado, sencillo, listo en poco tiempo, con contrastes de texturas y también de sabores dulces y salados… ¡es una maravilla!
Te va a encantar la guarnición de patatas con mantequilla de hierbas, muy sencillas de elaborar y te pueden servir para multitud de platos de carne y también de pescado. El toque dulce lo ponen las uvas, que asadas quedan muy ricas (pocas veces se nos ocurre cocinar las uvas y es una pena), junto con el vino Pedro Ximénez que combina fenomenal.
Preparación del solomillo de cerdo ibérico al horno
- Saca las piezas de solomillo de cerdo ibérico de la nevera para que lleguen al horno a temperatura ambiente y se cocinen mejor.
- Vamos a empezar cociendo las patatas sin pelar. Puedes optar por varias opciones, la más clásica es sumergirlas en agua hirviendo con un poco de sal durante unos 15-20 minutos o hasta que estén tiernas (dependerá de su tamaño). A mi me gusta más cocinarlas en el microondas, para ello utilizo patatas que tengan el mismo tamaño y las lavo bien con agua. Si son muy grandes las corto por la mitad y las coloco en un recipiente o estuche apto para microondas y que se pueda tapar. Cocínalas a máxima potencia durante unos 8 minutos, y si las pinchas con un tenedor y notas que están cocidas, ya puedes sacarlas, pero si les falta todavía un poco, dales un par de minutos más y vuelve a hacer la prueba. Deja el estuche abierto para que se vayan enfriando.
- Salpimenta los solomillos de cerdo por ambos lados y precalienta el horno a 180ºC con calor arriba y abajo y ventilador.
- En la fuente de horno que vayas a utilizar vierte el vino Pedro Ximénez y coloca también las uvas (previamente lavadas y escurridas), con sus ramas y todo. Si las uvas no están muy maduras, introduce la fuente en el horno a altura media cuando haya llegado a 180ºC y hornea 10 minutos para que las uvas luego estén más tiernas. Si están maduras y algo blanditas no es necesario este paso previo, espera a hornearlo todo junto.
- En una sartén a fuego medio-alto con un poco de aceite dora los solomillos de cerdo ibérico por ambos lados e incluso por los laterales, con un par de minutos por cada lado será suficiente.
Este es el aspecto de los solomillos de cerdo ibérico crudos
Ya tenemos los solomillos dorados
- Coloca los solomillos en la fuente de horno y hornéalos durante unos 20 minutos si cada pieza es de unos 350 g como los míos. Si son más gruesos deberás hornearlos 25 o incluso 30 minutos.
Así va directo el solomillo ibérico al horno
- Cada 5 minutos abre un momento el horno y riégalos con los jugos con ayuda de una cuchara, y a mitad de cocción dales la vuelta.
- ¿Cómo saber si ya están listos? Los tiempos que he dado es para que queden jugosos por dentro, ligeramente rosados, pero si los quieres más o menos hechos deberás cambiar los tiempos. Si tienes dudas corta el extremo más grueso y comprueba en qué punto está por si quieres seguir horneándolo más tiempo.
- Si unos minutos antes de terminar de hornearse ves que hay poco líquido, vierte un poco más de vino.
- Mientras tanto pela las patatas con ayuda de un cuchillo.
- Pon en una sartén la mantequilla a fuego medio, y cuando se haya derretido incorpora las hierbas, un poco de sal y las patatas, y ve moviéndolas para que se impregnen bien. Cocínalas durante unos 5 minutos, dándoles la vuelta para que se doren un poco por ambos lados.
Ya tenemos lista la guarnición de patatas con mantequilla de hierbas
- Saca la fuente del horno y déjala reposar 5 minutos.
- Puedes servir tal cual los solomillos o bien cortados en rodajas gruesas, acompañados con las uvas y las patatas y la salsa de vino por encima de la carne.
Así de espectacular queda el solomillo de cerdo ibérico al horno con su guarnición
Tiempo: 1 hora
Sirve y degusta
Al ser una carne que debe consumirse recién hecha y caliente, lo ideal es que los comensales estén esperando los platos y, justo antes, hayas partido en rodajas los solomillos. Si necesitas preparar la receta con antelación puedes dorar los solomillos y tener la fuente de horno preparada, y también las patatas incluso pasadas por la sartén. En el último momento hornea los solomillos ibéricos y calienta unos minutos las patatas en la sartén.
Los solomillos de cerdo ibérico quedan jugosos por dentro y con un exquisito toque dorado por fuera, además de un sabor más potente de lo habitual al ser ibéricos. No les puede sentar mejor el acompañamiento dulce a base de uvas y el punto del vino, y como colofón unas patatas aromáticas, tiernas y deliciosas. Sin duda alguna es un platazo de auténtico… ¡escándalo!
Solomillo de cerdo ibérico al horno con uvas y patatas con mantequilla de hierbas
Variaciones
Puedes acompañar el plato como prefieras, por ejemplo con unas zanahorias baby horneadas a la vez, unas verduras a la plancha o un puré de boniato o de calabaza, por ejemplo.
Si quieres prescindir del toque dulce puedes utilizar vino blanco en vez de tinto, no usar las uvas y pintar los solomillos con el majado de hierbas y mostaza que utilicé en esta receta de secreto ibérico de cerdo al horno, te aseguro que queda exquisito.
Consejos
Vigila bien tu asado y sigue las claves: que haya siempre líquido en la bandeja, darle la vuelta a mitad de la cocción para que se cocine genial por ambos lados y, hacia el final del horneado, estar pendiente del punto de la carne. Recuerda que para asegurarte, sobre todo si es la primera vez que horneas un solomillo, lo cortes por la parte más gruesa para comprobar cómo está. Aún así ten presente que deberás sacarlo del horno cuando esté un poco menos hecho de lo que tu quieres porque con ese reposo final de 5 minutos la carne se sigue cocinando internamente con sus propios vapores.