Tarta de queso y yogur al horno con manzana y masa quebrada

Si hay que pensar en un postre que haya sido versionado de mil formas diferentes es sin duda la tarta de queso. Horneadas, sin hornos, con distintas bases, texturas y acompañamientos de todo tipo, siempre que esté bien hecha y estructurada es un manjar, a mi personalmente me gustan de todos los tipos y por eso experimento mucho jugando con los ingredientes y sus proporciones hasta dar con recetas como ésta, con claro sabor a queso, buena textura y un acompañamiento a la altura.

Esta receta de tarta de queso y yogur al horno con manzana y masa quebrada es una tarta muy fácil de preparar, queda riquísima con un fantástico sabor a queso y sin excesos dulces, y las manzanas se caramelizan un poco para ser el colofón perfecto. En este caso he utilizado manzanas Ambrosia porque a pesar del caramelizado no se deshacen y mantienen su forma y tienen un sabor dulce ideal para esta receta ya que no restan sabor a la parte de queso.

Ingredientes para un molde de entre 20 y 23 cm de diámetro

• 2 manzanas Ambrosia.
• 300 g de queso crema.
• 2 yogures naturales azucarados de 125 g cada uno.
• 100 g de azúcar más otros 25 g para cocinar las manzanas.
• 2 huevos L.
• 25 g de harina de trigo.
• 1 masa quebrada redonda. También puedes prepararla casera con mi receta de masa quebrada.
• 1 cucharada sopera de mantequilla sin sal.

Preparación, cómo hacer tarta de queso y yogur al horno con manzana y masa quebrada

1. La mezcla de la tarta la puedes hacer a mano con unas varillas manuales o bien optar por unas varillas eléctricas o por un robot amasador con el accesorio de varillas.
2. Utiliza un bol o el que incorpora el robot, echa en él el queso y bátelo unos segundos, incorpora el azúcar y mézclalo junto un minuto aproximadamente.
3. Casca un huevo, añádelo y bate y cuando esté prácticamente integrado con la mezcla haz lo mismo con el otro huevo.
4. Añade un yogur, mezcla durante un minuto, añade el otro y sigue mezclando otro minuto más.
5. Incorpora la harina haciéndola pasar por un colador para que caiga sin grumos (es decir, tamizándola) y sigue batiendo un par de minutos hasta que la mezcla sea totalmente homogénea y no haya grumos de ningún tipo. No es una masa a la que haya que introducirle aire así que si lo haces manualmente no hace falta que batas con energía sino simplemente mezcla bien.
6. Tapa la mezcla con papel film y déjala reposar media hora a temperatura ambiente, o en la nevera si hace calor.
7. Precalienta el horno a 180ºC con calor arriba y abajo y ventilador.
8. Si vas a preparar la masa quebrada en casa sigue nuestra receta. Coloca la masa quebrada en tu molde de forma que quede cubierto el fondo y las paredes. Ve aplastándola con tus dedos para que quede bien pegada al molde y estructurada. Un truco que utilizo es cortar un trozo de papel de horno superior a la medida del molde y entonces pillarlo con él, es decir, abro el molde, pongo el papel encima de la base y cierro el molde de forma que el papel quede pillado y cubriendo la base.
9. Pínchala con un tenedor por toda su superficie, esto evitará en gran parte que suba durante el horneado.
   

   Debemos pegar así la masa quebrada al molde y pincharla con un tenedor por toda su superficie

10. Para conseguir definitivamente que no suba, coloca encima un papel de horno, que cubra de sobra toda la superficie interior del molde, y en su interior garbanzos secos ya que se necesita peso encima de toda la superficie de la masa. Yo lo que tengo es 1 kg de garbanzos en un bote y solo los utilizo para este propósito, después de utilizarlos los vuelvo a guardar para una próxima vez ya que no se recomienda cocinarlos.
11. Introduce el molde en el horno a altura media y hornéala alrededor de 15 minutos o hasta que veas que sobre todo la zona de la base no está cruda y que las paredes no se hayan dorado en exceso.
12. Saca el molde y vierte en su interior la mezcla de queso.
    

    Rellenamos el molde con la mezcla de queso

13. Introduce de nuevo el molde en el horno a altura media y hornéala unos 30-40 minutos, procurando que la superficie se dore pero que no se queme. Puedes hacer la prueba del palillo: si introduces un palillo éste debe salir limpio, y si no es así déjala horneándose unos minutos más. Si se te está dorando demasiado por arriba, cúbrela con papel de aluminio y sigue horneándola hasta que esté cuajada.
14. Cuando esté lista apaga el horno, abre un poco la puerta (del horno) y deja la tarta dentro, para que no sufra mucho choque de temperatura de golpe. Verás que se baja un poco, es normal.
15. Sácala del horno, espera a que se enfríe totalmente a temperatura ambiente y desmóldala. Después puedes consumirla tal cual o bien dejarla reposar en la nevera. A mi como más me gusta es reposada de un día para otro, me da la sensación de que gana en sabor.
16. Mientras se hornea o mientras se enfría puedes preparar las manzanas. Pélalas, descorazónalas y pártelas en pequeños cubitos.
17. En una sartén o cazo a fuego medio-bajo echa la mantequilla y cuando se haya derretido incorpora las manzanas, revuélvelas y deja que se cocinen durante unos 5 minutos.
18. Incorpora el azúcar, mézclalo bien con las manzanas y cocínalas 5 minutos más o hasta que estén a tu gusto. A mi me gusta que todavía conserven el interior un poco duro y no estén blandas en exceso así que con estos 10 minutos en total de cocinado es suficiente.
19. Vierte las manzanas por encima de la tarta y repártelas por la superficie.
    

    Ya tenemos lista la tarta de queso y yogur con manzana

Tiempo: 1 hora

Sirve y degusta

El reposo le sienta fenomenal a esta tarta, de hecho cuando más me gusta es un par de días después de haberla horneado aunque si optas por tomarla nada más se haya enfriado también está riquísima. Eso si, si la tienes en la nevera sácala al menos una hora antes para que no esté fría.

La manzana le queda fantástica a esta tarta de queso, personalmente no me gusta cubrir este tipo de tartas con mezclas demasiado dulces porque me gusta que se note el sabor a queso y sin duda la manzana ligeramente caramelizada lo consigue. Es una combinación de auténtico… ¡escándalo!

Tarta de queso y yogur al horno con manzana y masa quebrada

Variaciones

Si prefieres como base las clásicas galletas trituradas con mantequilla, en esta otra receta de tarta de queso al horno puedes ver cómo prepararla. También puedes sustituir la masa quebrada por hojaldre, horneándolo de la misma forma pero seguramente necesite menos de 15 minutos para estar lista.

Consejos

Para evitar que la mezcla contenga aire mezcla suavemente con varillas manuales o eléctricas sin permitir que éstas salgan de la mezcla e incorporen ese aire. Esto es importante para que la textura final de tu tarta de queso esté compacta y perfecta.

También puedes preparar la tarta de queso sin base. Simplemente forra la base del molde tal y como he explicado más arriba con mi truco y unta las paredes de tu molde con mantequilla para que no se pegue al fondo, añade la mezcla y directa al horno.